Los niños

Para Edenny, Niurka, Juan José y Carlisbeth el Hospital J.M. de los Ríos ha sido su segunda casa. Allí han crecido y, a sus cortas edades, han tomado conciencia de la finitud de la vida. Con lucidez, evocan los momentos que los ha marcado durante su estancia en el pediátrico y rememoran aquello de lo que han sido testigos mientras se aferran a la esperanza de sanar.

Quiero volver a tener la piel rosada

Una de cada mil personas en el mundo padece de talasemia, una enfermedad cuyo tratamiento consiste en frecuentes transfusiones sanguíneas. Edenny Martínez es una de ellas. Durante sus 14 años no ha dejado de ir al Servicio de Hematología del Hospital J.M. de los Ríos. Es testigo de que allí las cosas cada vez son más difíciles.

Voy a seguir luchando hasta que me sane

Juan José tiene leucemia linfoblástica: su médula ósea produce linfocitos inmaduros. Se la detectaron a los 5 años. Y ya tiene 10. Han sido cinco años en los que ha recibido muchas sesiones de quimioterapia en el J.M. de los Ríos. Ahora requiere un trasplante de médula.

Me ponía triste con todo lo que oía

Carlisbeth Falcón nació en 2006 en Sanare, estado Lara. Como requería un trasplante de riñón, a los 9 años llegó con sus padres al Hospital J.M. de los Ríos, en Caracas, adonde tendría que ir muchas veces más. De vuelta a su casa, rememora sus días en el pediátrico.

Dios es el que me va a mandar el trasplante

Desde hace cuatro años se dializa tres días a la semana en el Servicio de Nefrología del J.M de los Ríos —el único hospital del país en el que les hacen diálisis a niños y adolescentes—, para controlar una insuficiencia renal aguda y crónica. Nació en Valle de la Pascua y ahora vive en Cotiza, con sus tres hermanos y sus padres.