La enfermedad que hace añicos la memoria supone un desgaste para los cuidadores de los pacientes. Al principio, los hijos de Hilda Rojas —Yiya, como la llaman sus allegados— pensaban que los olvidos de su madre eran achaques menores a consecuencia de su vejez. Luego entendieron que debían dedicarse a cuidarla, aunque ella ya no los recordara.
Terapeuta ocupacional, salió de Venezuela rumbo a Perú con la expectativa de hacerse un espacio para ejercer su profesión allá. Después de no pocos tropiezos, Erika Lezama llegó al que pensó que sería el trabajo de sus sueños, un centro terapéutico para niños ubicado en la zona más exclusiva de Lima. Allí, entre sinsabores, se dio cuenta de la profesional que quería ser.
Nuestros documentos de identidad pueden ser vistos como indicadores o fragmentos de nuestra propia historia. En un diálogo consigo misma, Mariana Graterol –doctora en ciencias químicas, acostumbrada a examinar las pequeñas cosas que componen el todo– hace el ejercicio de explorar en su identidad, y en su recorrido como migrante, a partir de los datos asentados en su pasaporte.
Una noche, en la emergencia del hospital en el que trabajaba, llegó un niño zapatero de 9 años que había tenido un accidente mientras reparaba un calzado. Esa vez el doctor Rubén Darío Carrero aprendió, con ese caso, que ser médico consiste, a veces literalmente, en ponerse en los zapatos del otro.
Psicólogo social, analista, profesor titular jubilado de la Universidad Central de Venezuela, Leoncio Barrios se considera a sí mismo un bailarín. Fue un niño y un adolescente tímido que soñaba con aislarse del mundo como una forma de alejarse de las burlas de las que era objeto en la escuela y el liceo. Así fue hasta que la danza se convirtió en un camino hacia la libertad.
La lista de las cinco historias más leídas en nuestro sitio durante el año 2022.
Sin la posibilidad de comer adecuadamente y mantener el tratamiento farmacológico que le indicaron para la rectocolitis ulcerosa que padecía, Lisset Páez Soto se fue a Colombia, junto a su esposo, de donde él había migrado a Venezuela décadas atrás. Allá, estabilizada, inició un negocio y se dedicó a ayudar a migrantes como ella. Una noche, el fuego pareció volver todo cenizas.
Han sentido la adrenalina que recorre el cuerpo cuando la vida de otros pende de un hilo. Han vivido minutos intensos en ambulancias, hospitales, salas de espera y urgencias. Han atendido a heridos en accidentes de tránsito o por armas de fuego, damnificados, parturientas e infartados. Saben actuar con precisión y mesura ante una catástrofe. Y se empeñan en enseñar eso a todo el que lo necesite. Yham Perdomo y Norys Celis son esposos, paramédicos y profesores de la Fundación Venemergencia.
Pionero en Venezuela en el uso de la inmunohistoquímica —método que permite diagnósticos patológicos más precisos—, el doctor Jorge García Tamayo se dedicó, por seis décadas, a la investigación y a la docencia. Un día invitó a Elsie Picott, entonces residente del posgrado de anatomía patológica, a desarrollar una investigación a su lado. Desde entonces, […]
Cosas tan sencillas como brindarles a los pacientes atención de calidad, darles palabras de aliento o un abrazo pueden ser gestos invaluables para ellos. Eso aprendió Rubén Darío Carrero cuando apenas comenzaba su carrera como médico. En este texto, narra la vertiginosa anécdota que suscitó esa reflexión.