En mayo de 2019, publicamos la historia del doctor Carmelo Gallardo, jefe del Banco de Sangre del Hospital Central de Maracay, detenido por participar en una protesta ciudadana. De allí salió tres meses después, tras tomar la dura decisión de declararse culpable porque, de lo contrario, no podría volver a ejercer la medicina.
Nicole Reyes tenía 15 años cuando comenzó a querer estudiar medicina. Más tarde, al graduarse de bachiller, aplicó para cursar esa carrera en la Universidad de Los Andes, en Mérida, donde vivía. “Lo más fácil es ingresar, lo difícil es salir de la universidad”, le advirtió un profesor el día que fue admitida. Fue una frase profética.
Cada tanto, durante sus vacaciones universitarias, Alejandra regresaba a Güiria, el pueblo costero del estado Sucre, en el oriente venezolano, donde nació y creció. Siempre pensó que, luego graduarse en Caracas, regresaría definitivamente a sus calles, con su gente y el mar. Allí quería hacer su vida. En uno de esos viajes, sin embargo, se dio cuenta de que ese plan tenía que cambiar.
Cuando en 2017 a Erickvaldo Márquez lo metieron preso acusado de asesinar a un trabajador de la gobernación de Mérida, le faltaba poco para terminar sus estudios en la Universidad de Los Andes. Un juez lo dejó en libertad en 2020 porque no encontró pruebas en su contra, pero la Fiscalía apeló la decisión. En prisión, el 24 de marzo de 2021, este joven defendió su trabajo de grado.
El reportero gráfico Samir Aponte ha mantenido una labor social en Las Bateas de Maurica, comunidad desasistida de Barcelona, estado Anzoátegui, en el oriente venezolano. En medio de los preparativos de una jornada odontológica que se llevaría a cabo allí, comenzó a sentir síntomas de covid-19.
El cierre de las oficinas de Migración en
Colombia por la pandemia afectó a miles de personas, la mayoría venezolanos, y limitó su derecho a la identificación. Un problema estructural de ese país que se acentuó con la llegada de las restricciones por la covid-19.
Poco después de migrar a Colombia, nuestra colaboradora Johanna Osorio Herrera supo que estaba embarazada. Junto a su esposo Juan, se entusiasmó con la noticia de su primer hijo. A las semanas, ella comenzó a sangrar inexplicablemente, hasta que le hicieron un eco que reveló que el embrión había muerto en la semana seis. En esta historia testimonial cuenta el dolor de aquellos días.
El trabajo consistía en bailar salsa, merengue y bachata en República Dominicana. Alejandra, segura de que tenía swing, hizo la audición y quedó seleccionada. Tuvo tropiezos al salir de Venezuela, pero no perdió el entusiasmo. Allá, entre escenarios, conoció a Wander. Poco después, sus vidas dieron un giro que los estremeció.
Luego del golpe de Augusto Pinochet a Salvador Allende, muchas familias migraron de Chile. Fue el caso de los Ponsot, los Balaguer y los Escobar, quienes pasaron un tiempo en Finlandia y luego se asentaron en Venezuela. Décadas después, algunos regresaron al punto de partida de ese viaje.
Decenas de venezolanos con VIH migran a Perú buscando el tratamiento que en su país ya no pueden conseguir. Muchos de ellos deben enfrentar la negligencia médica y la discriminación en los hospitales. Sobre lo que padecen en ese país cuenta este trabajo, publicado por el medio peruano Salud con Lupa…