La Guajira venezolana es un universo muy particular, donde todo es posible y todo tiene su precio. Lo sabe Teiruma, una wayuu que lleva gasolina de contrabando hasta Maicao. Durante el cierre de la frontera, decretado por el gobierno venezolano en 2015, un militar consintió que pasara la “caleta” a cambio de sexo.
El padre de Willian Díaz tenía un mal presentimiento la noche del jueves 4 de mayo de 2017. Había pasado mucho tiempo desde que le informó que trataría de rescatar a unos amigos. A esa misma hora, lo estaban golpeando brutalmente en una calle de El Tigre, en una jornada de represión que concluyó con 41 detenidos.
Un domingo del mes de marzo, José Sayago ingresó a la emergencia del Hospital Universitario de Caracas porque no podía respirar. Cinco meses después, aún está recluido en ese centro de salud, y no mejora. Su esposa dice que su cuerpo parece el de otra persona. El hambre le impide mejorar.
Carmen Contreras tiene nueve años esperando el regreso de su hija, secuestrada en un pueblo del estado Táchira. En 2014, en una nota de un medio colombiano sobre los campamentos guerrilleros, apareció la imagen de una joven muy parecida, vistiendo el uniforme de las FARC. Carmen jura que es su hija.
Gabriel tiene 11 años y estudia 5to grado. Suele caminar desde San Agustín, donde vive, hasta la avenida Victoria, en Caracas, para procurarse algo de comida. La periodista Carmen Victoria Inojosa se ha encontrado con él en las cercanías de su edificio. Es la historia del nuevo niño de la calle en Venezuela.
La mañana del 11 de abril de 2002, Malvina Pesate salió a marchar como lo había venido haciendo todos esos años. La multitudinaria marcha enfiló hacia Miraflores y, en la esquina de La Pedrera, sintió un fuerte golpe que la hizo perder el conocimiento. Una bala entró por su mandíbula y salió un poco más arriba de la nuca.
Entre el 3 de junio y el 22 de julio La vida de nos estuvo publicando, cada sábado, la serie «Son presos políticos, nosotros también», en la cual se contaron los casos de 8 presos políticos, desde la perspectiva de alguno de sus familiares, para mostrar la dimensión humana de un drama que a veces se pierde en la estadística.
Josefina Herrera vive en Antímano, tiene 59 años y es la única empleada que queda en la empresa donde trabaja. Sus vecinos la conminaron a que sacara el Carnet de la Patria. Fue tal la encrucijada en la que se sintió, que recordó su pasado con el marido maltratador que había dejado atrás hace 15 años.
El pasado 4 de mayo, Katiuska Salón, una estudiante de Derecho de la Universidad Fermín Toro, de Barquisimeto, se dirigía a su carro cuando fue interceptada por tres mujeres armadas con un punzón. Lo que pensó que era un secuestro concluyó en un tráiler de la Guardia Nacional, donde terminó detenida, acusada de ataque al centinela.
Renzo Prieto, un joven tachirense militante de JAVU, fue detenido en Caracas el 10 de mayo de 2014. Su hermano Jorge asumió la tarea de asistirlo hasta que comenzó a sentirse amenazado y optó por el exilio. Renzo continúa preso en El Helicoide, pese a haber sido electo diputado suplente de la Asamblea Nacional.