Desde principios de año, los tanques de agua del J.M. de los Ríos, están contaminados. En diciembre, tocaba hacerle mantenimiento a las máquinas de la sala de hemodiálisis. Se dejó pasar y continuaron dializando a los niños. Cuatro de ellos han muerto en dos meses. Liliana tiene allí a su hijo, y teme por su vida.
Luis Rafael Colmenares trabajaba como cajero en un banco de Maracay, y en febrero de 2015 fue acusado de formar parte de un intento de magnicidio. Zaida, su madre, resuelve a diario para sobrellevar una economía doméstica cada vez más precaria y poder viajar 600 kilómetros para ver al hijo condenado a cinco años de prisión.
Periodista caraqueña. Me apasiona contar historias y esto me ha llevado a conocer cientos de realidades. Actualmente, resido en Buenos Aires.